México: Entrevista con Carmina del Valle, Directora de Ferias Latinoamericanas

Creado: Lun, 19/09/2011 - 04:23
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Por Alejandra Maciel
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México: Entrevista con Carmina del Valle, Directora de Ferias Latinoamericanas

Un grupo de periodistas conversamos con Carmina del Valle, Directora de Ferias Latinoamericanas, a propósito de la historia, el presente y el porvenir deLatin American Food Show (LAFS), exposición de importancia creciente en el sector de los alimentos.

Satisfecha por la sexta edición de esta feria, que tuvo lugar los días 7,8 y 9 de septiembre en la ciudad de Cancún, la empresaria mexicana enfatizó que el objetivo de LAFS es contribuir a hacer de este destino turístico la sede comercial de América Latina y una puerta de entrada para el mundo a esta fascinante región.

Háblanos sobre cómo nació LAFS…

La idea era encontrar la manera de atraer turistas de negocios. Haciendo un análisis de las ferias que se hacían en México antes de que se abrieran las fronteras por el Tratado de Libre Comercio (TLC), nos dimos cuenta de que eran ferias dirigidas al mexicano.

Después de tal apertura,  las pocas ferias importantes que había desaparecen porque los compradores se van a comprar fuera de México, en la búsqueda de nuevas opciones. Entonces, la cuestión era encontrar la manera de atraer la mirada de los grandes compradores y hacerlos venir a nuestro país.

Además,  tras un recorrido por las ferias del mundo observamos que Latinoamérica no está representada. Más allá de ciertas presencias aisladas, en realidad no hay un concepto claro como región, así como conceptualizamos Europa o Asia.

Así pensamos que era importante hacer notar que en materia de alimentos Latinoamérica le ha regalado al mundo un montón de productos muy conocidos y otros menos famosos.  Nos preguntábamos por qué si hablamos el mismo idioma, no hemos aterrizado un intercambio comercial en la zona, por ya no decir incluso que los latinos no hemos logrado tener una moneda común.

Entonces, la idea fue reunir una oferta exportable de toda la región de Latinoamérica en un mismo punto de encuentro.

¿Por qué tenía que ser impulsado este evento precisamente en Cancún?  

Primero porque Cancún-Riviera Maya es hoy un lugar que el mundo ya conoce. Los mexicanos hemos invertido muchos millones en la marca Cancún y hay que aprovecharla.

Como dije, la idea inicial era atraer al turista de negocios. Pero enseguida nos dimos cuenta de que no nada más es importante representar dicha región, sino convertirnos en una puerta de entrada a ella.

Llegar a Cancún es mucho más fácil que a otros lugares por la infraestructura aeroportuaria y la conectividad aérea con que cuenta, sumadas a la oferta de cuartos que tiene junto con Riviera Maya (en conjunto más de 70 mil cuartos de hotel), todo lo cual nos pone dentro de las 4 ciudades del  continente en donde realmente se pueden organizar eventos de 15 a 20 mil personas (las otras son Chicago, Orlando y las Vegas).

Además, con el recinto ferial Cancunmesse (de 25 mil metros techados, más un patio de 10 mil metros y una proyección para tener otras cuatro naves que se están construyendo, para conseguir  60 mil metros techados y 30 mil metros abiertos de recinto ferial)  ya nos pone en el margen de las grandes ferias europeas y asiáticas que tienen 180 mil o hasta 320 mil metros de feria.

Para los alemanes messe designa un gran recinto ferial. Así que nosotros optamos por un nombre internacional, ya conocido por los profesionales, que  indica una feria de proporciones interesantes, con esquemas de  ferias monográficas, de una sola actividad industrial, a fin de optimizar el tiempo que es el recurso más apreciado por todos.

Entonces, LAFS es un modelo de negocios, que puede reproducirse en 150 actividades  comerciales e industriales y que constituye una manera de dar un giro al turismo tradicional propio de Cancún. En mi opinión, hoy Cancún tiene que aspirar a convertirse en una sede comercial de Latinoamérica y ese es el objetivo de LAFS, generar esa sinergia de negocio, así como ir consolidando el negocio ferial en México.

La idea de nuestra empresa, que se llama ferias latinoamericanas, es que generar otros eventos en esta misma lógica y bajo el mismo concepto latinoamericano.  

¿Cómo ha evolucionado LAFS desde su primera edición y hasta ahora?

Ha crecido mucho. El primer año tuvimos apenas 200 expositores y unos 2 mil visitantes. Este sexto año ya tenemos 600 stands. Igualmente han aumentado el número de países participantes.

Nosotros empezamos después de Wilma, y no fue fácil, porque ha implicado abrir un mercado, a base de concientizar con la idea de que Cancún puede ser más y algo distinto a lo que ya es. Es un mercado nuevo. Pues aunque ya había un centro de convenciones, no tiene nada que ver con un recinto ferial.

Afortunadamente ha crecido la aceptación del evento, y hoy la manzana azul, que se ha convertido en el sello de LAFS, ya es reconocida y esperada. Todo se ha logrado poco a poco y con mucho trabajo.  

Me siento muy contenta, porque incluso Panamá ha pedido exportar la feria… a lo mejor pronto podremos decir que somos capaces de exportar conceptos feriales.

Cada año hemos consolidado también a los expositores. Lo cual muchas veces ha implicado cambiar su mentalidad, pues habían estado acostumbrados a vender sus productos durante la feria más a que a promoverlos repartiendo muestras.

Ha requerido además capacitarlos para que conozcan e incorporen todo un leguaje y lógica de negocios y exportación que no empleaban.  De ahí la importancia de las conferencias que organizamos como parte del evento con esta clase de temas, aunque no nos limitamos a ese breve periodo de tiempo sino que estamos trabajando con la expositores a lo largo de todo el año para que crezcan, para que tengan su registro de marca, para que se vayan especializando, etc.

Estoy convencida de que si regresamos los recursos a las comunidades, a los pequeños productores y a las empresas PyMES tendremos un México mejor.

Este año además hemos tenido el apoyo fundamental de la Secretaría de Economía, que ha dado recursos PyMES para que los pequeños productores puedan venir y tener sus stands sin costo para ellos, así como de la Secretaría de Relaciones Exteriores que nos ha ayudado a convocar y repartir invitaciones a  las embajadas y consulados de México en el mundo para invitar a los compradores.

¿Quiénes más se tienen que sumar?

Todos. Los gobiernos estatales y municipales, que pueden apoyarnos más. La Secretaría de Turismo, Pro-México […] Todos deben participar para poder consolidar el negocio ferial en  nuestro país.

¿Cuáles son tus expectativas sobre el futuro de LAFS?

Yo quiero tener a todos nuestros países representados, con su oferta real, mostrando toda la variedad de productos que tenemos en la región.  Quiero que vengan las marcas grandes, ya bien posicionadas,  y quiero a las marcas chiquitas, sumadas en un mismo esfuerzo.

Quiero que los apoyos para ellas sean equitativos y que se las respalde por igual. Quiero un espacio en donde todos podamos aprender a ser solidarios y en donde podamos aprender a crecer juntos. Eso es lo que quiero.
 

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