Hace poco más de 150 años surgió en Logroño un “nuevo vino”, un vino pionero y, como tal rupturista con las prácticas de la época. De menor graduación, envejecido en madera, con capacidad para viajar y envejecer y que reclamaba un lugar internacional para Rioja.
Su artífice Don Luciano de Murrieta persona de talento liberal, vocación benéfica, criado entere Perú, España y el Reino Unido, militar de carrera, ayuda de campo del General Espartero, vinculado familiar-mente con la banca inglesa, al que el rey de España Amadeo de Saboya hizo Marqués gracias a su brillante labor en rioja.
En Rioja creó su primer vino fino, un tinto embotellado hecho a imagen y semejanza de los del Medoc. Luciano de Murrieta aprendió las técnicas bordelesas e importo el concepto de chateaux a la finca que adquirió a pocos kilómetros de Logroño y en cuyas primeras etiquetas podía leerse Chateaux Ygay.
Así inicio una nueva era para los vinos de Rioja , hizo historia y dejó como legado una de las marcas más emblemáticas de rioja hasta nuestros días : Castillo Ygay de Bodegas Marqués de Murrieta.
Actualmente en Cuba Bodegas Joan Sardá comercializa Castillo Ygay Tinto, Gran Reserva Especial 1998, un gran reserva de Rioja clásico de primera calidad, agradabilísimo y con una complejidad excepcional.
Se trata de un vino de aroma complejo y profundos matices especiados. En el paladar se muestra con cuerpo, potente pero sedoso, con sensaciones especiadas y de frutas confitadas. Castillo Ygay Tinto es el tinto de mayor tiempo de crianza y estandarte de la larga historia de Bodegas Marqués de Murrieta.
Esta añada de Castillo Ygay Tinto, Gran Reserva Especial 1998 está elaborado con los mejores frutos de la Finca Ygay (300 ha) de Marqués de Murrieta, de los viñedos más antiguos y ubicados en la zona de mayor altitud: Tempranillo acompañado de algo de Mazuelo y Garnacha Tinta.
Se elabora en bodega con un peculiar encubado de una duración de 20-25 días, durante los cuales se realizan continuas y diarias labores de remontados y bazuqueos, orientadas a provocar el contacto de los hollejos con el mosto y realizar una extracción natural de aromas y polifenoles. Su crianza se realizó durante 41 meses en barricas bordelesas de roble americano.
