El tenor Plácido Domingo abrió su segundo restaurante en Nueva York, denominado Zengo y especializado en comida asiática y latina, junto al chef Richard Sandoval, con quien planea inaugurar un establecimiento en Doha, la capital de Qatar.
Plácido Domingo continúa empeñado en seguir los pasos de su abuela. El tenor español se adentró en el sector de la restauración en 1996, al abrir su primer restaurante propio (Domingo, en Nueva York).
El artista imitaba así a su abuela paterna, María Ferrer, que en 1915 inauguró un establecimiento de comida en Zaragoza, en el barrio del Tubo, con el que pretendía lograr los recursos que necesitaba para comprar un coche.
La primera experiencia del tenor en Nueva York no tuvo éxito. Domingo estaba a punto de cerrar el restaurante cuando conoció a un chef mexicano, Richard Sandoval, amigo de su hijo.
Convertidos en socios, en 2002, decidieron reformar el local, que pasó a llamarse Pampano, se olvidó de la comida española y se transformó en un local de pescado con acento mexicano.
Pampano sigue abierto hoy, en el centro de Manhattan, a escasos metros de hoteles de lujo como el Four Seasons o el Waldorf Astoria.
La alianza de Domingo (de 69 años de edad) y Sandoval fue creciendo y hoy explotan cerca de una decena de restaurantes en EEUU y México, con marcas como Pampano, Zengo y La Sandía. Sandoval posee, además, otros locales en solitario.
Los dos socios acaban de ampliar su presencia en Nueva York, con la apertura de su segundo restaurante en la Gran Manzana.
El local ha sido bautizado como Zengo (igual que otro restaurante que Domingo y Sandoval poseen en Washington DC, la capital de EEUU). Situado en la Tercera Avenida (en el área de Kips Bay), está especializado en comida asiática y latina de vanguardia.
Con un rango de precios que oscila entre 31 y 50 dólares (entre 23,12 y 37,3 euros) por persona, puede albergar hasta 120 comensales y cuenta con un bar de copas en el sótano (La Biblioteca), que ofrece 300 variedades de tequila, bebida que se ha convertido en su principal reclamo. El plato más caro, un lomo de cordero asado, cuesta 38 dólares.
Domingo acudió a la fiesta privada de inauguración del restaurante, celebrada el lunes pasado, apenas un mes después de haber superado con éxito una operación de cáncer de colon.
