Cine Cerere et Baccho friget Venus es la máxima latina que se traduce libremente como "el amor se enfría, sin comida y vino". Eros y el apetito, libido y deseo, la comida y el amor están unidos entre sí como un hombre y una mujer en un amoroso abrazo.
Incluso el acto de comer tiene connotaciones románticas, y algunos alimentos evocan sensaciones que son similares a hacer el amor: hacen que nos enciendan la piel y causan que el flujo sanguíneo se acelere a través de las venas.
Un solo vaso de vino puede dejar con un sentimiento persistente de calor, de felicidad e inhibición.
Ciertos alimentos son considerados asociados con el amor, la fertilidad femenina y el deseo sexual de hombres, debido a que el alimento en cuestión puede tener una asociación mitológica con el amor.
La comida es considerada afrodisíaca debido a los sentimientos emocionales que evoca. Eso puede ser porque la comida se sirve en un restaurante especialmente romántico con la música y la luz apropiadas, o simplemente puede ser porque realmente gusta el sabor de los alimentos en cuestión.
Hace un tiempo un grupo de investigadores de Chicago determinó que el olor de la pizza desencadena impulsos sexuales. Los aromas fragantes del mozzarella derretido, el tomate y la albahaca al vapor estimulan el flujo sanguíneo a los órganos esenciales
Por último, el alimento potencialmente afrodisíaco en realidad puede contener trazas de productos químicos y las hormonas que son producidas por nuestro cerebro cuando nos enamoramos o nos sentimos felices y esto se aplica tanto para el chocolate como para el chile.
