El sésamo o las semillas de sésamo son un alimento muy beneficioso para la salud debido a su valor nutricional y que se puede encontrar y consumir de formas muy variadas.
El sésamo o ajonjolí es como se suele referir a las semillas del sésamo y se suelen usar en la comida como condimento. El cultivo de esta planta es uno de los más antiguos debido a su uso en la producción de aceite. A pesar de ser unas semillas muy pequeñas, están consideradas como un superalimento debido a su valor nutricional.
Existen tres tipos de semillas de sésamo:
- - Sésamo blanco: es el más utilizado en cocina y tiene un gran contenido en calcio.
- - Sésamo negro: a pesar de que también se usa como alimento, destaca su uso en el sector de la medicina, ya que produce una mayor cantidad de aceite.
- - Sésamo rojo: contiene una cantidad mayor de hierro.
Como se puede observar, cada tipo de semilla tiene ciertas características, aunque en términos generales son prácticamente lo mismo. Las semillas de sésamo son una fuente de calcio muy importante: 25g supone una tercera parte de la cantidad diaria recomendad. También tienen dosis de magnesio, cobre y hierro, además de fosforo, cinc y manganeso.
Otro de los beneficios de tomar sésamo es que contiene una gran variedad de vitaminas que son muy reseñables para el sistema nervioso como la vitamina B1, B3 y B6, además de acido fólico. También tiene un alto contenido en lecitina que es muy beneficioso para reducir o controlar los niveles de colesterol, así como ácidos grasos saludables, como el Omega 3 y Omega 6.
Propiedades del sésamo:
- Salud cardiovascular: el sésamo tiene un alto contenido en ácidos grasos insaturados, lo cual hace que se reduzca el colesterol y de este modo beneficiando a las arterias y al corazón. A parte del colesterol, ayuda a controlar la tensión arterial por su contenido en magnesio.
- Piel, pelo y uñas: el contenido graso que tiene el sésamo tiene otros efectos beneficiosos en el cuerpo y es que favorece la salud del peli, piel y uñas. Ayuda a prevenir la pérdida de cabello debido a su contenido en sales minerales.
- Salud intestinal y ósea: la fibra que está presente en el sésamo ayuda a regular el tránsito intestinal mejorando la digestión. Su contenido en calcio, magnesio y zinc fortalece los huesos.
- Antioxidantes: los antioxidantes ayudan a prevenir ciertos daños que se producen en las células, favoreciendo la salud cardiovascular, así como retrasando el envejecimiento prematuro de las células.
- Disminución de grasa: su contenido en aminoácidos, triptófano y polifenoles ayuda a la eliminación de grasa del organismo.
¿Cómo consumir el sésamo?
- Semillas: una de las formas mas comunes de consumir sésamo es directamente de las semillas. Estas pueden usarse como condimento para ensaladas o también pueden usarse para decorar algunos postres. También pueden tostarse e introducirlas en platos como carnes o pescados.
- Aceite: El aceite de sésamo se extrae por la presión sobre la semilla, y puede conservarse durante años. Este aceite es muy utilizado tanto en la cocina como en la medicina para el cuidado de la piel.
- Tahini o Hummus: el tahini es una mantequilla conseguida moliendo las semillas. O también existe el hummus, que es un pate elaborado principalmente con garbanzos cocidos, limón, ajo y tahini.
