Termatalia amplía su red internacional incorporando a Ecuador a través de la designación de Ana María Cruz, profesional vinculada a la comercialización turística, como delegada en este mercado para la Feria Internacional de Turismo de Salud y Bienestar, que ya cuenta con delegaciones en 18 países de cuatro continentes.
Ecuador se suma así a la red de colaboradores que Termatalia posee en destinos con potencial termal y que apuestan por este sector a través de instituciones y empresas interesadas en el desarrollo del producto “Turismo de Salud y Bienestar”. Ana María Cruz entra a formar parte del grupo de delegados que colaboran para promocionar la feria como centro de negocios internacional del termalismo, la talasoterapia y el spa.
Termalismo en Ecuador
Debido a su ubicación geográfica a lo largo del llamado Cinturón de Fuego del Pacífico, las cuatro regiones de Ecuador: Sierra, Oriente, Costa y Galápagos, cuentan con actividad volcánica que supone el origen de aguas cálidas, que los habitantes ancestrales de Ecuador han usado por sus poderosos efectos curativos gracias a los altos contenidos de nutrientes, minerales y sulfuros. A medida que crece su popularidad, muchos habitantes locales de los sitios donde estos manantiales son descubiertos, han construido balnearios que convierten a este país de Sudamérica en un inmejorable destino para los amantes de los tratamientos naturales y de spa.
Existen dos tipos de aguas termales en Ecuador, las que están contenidas en piscinas naturales de tierra, como es el caso de las que originalmente descubrieron y usaron los indígenas de la región y las que son encausadas hacia piscinas artificiales, hechas por el hombre. Cada cual tiene sus propias ventajas: mientras que las artificiales son cálidas, limpias y accesibles geográficamente, las naturales son menos caras y más privadas, más lejanas y difíciles de acceder.
Toda la región ubicada al norte de Riobamba, en la Sierra ecuatoriana, produce aguas termales espectaculares debido a la presión que sobre estas ejercen varios volcanes, entre los que se encuentra el más alto del país en activo, el Cotopaxi. En los pueblos de Papallacta existen muchos de estos manantiales que al combinarse con la presencia de una exuberante vegetación dada su cercanía con el Oriente, convierten a este territorio en un verdadero paraíso de aguas termales donde abundan spas y sitios turísticos de gran calidad.
